¿SEGURIDAD Y FIN DE LA GUERRA?
Diofanor Rodríguez L CPP, PSP
Desde el inicio de las conversaciones con el grupo terrorista de las FARC-EP, y el gobierno de Colombia en la Habana Cuba. Se ha dicho que con la firma del acuerdo final se llegara a la paz. Hecho que desde ya considero poco cierto, debido a que hay otros actores que no están en este dialogo, como lo son el grupo narco guerrillero ELN las GAO (grupos armado organizados). Que tienen su propia óptica frente a estos temas.
La seguridad en el desarrollo de esta negociación, se tiene que cuestionar, debido a que está claro que no todos los integrantes de este grupo ilegal se desmovilizaran, como aconteció cuando el grupo insurgente M 19 realizo su desmovilización y muchos de sus integrantes reforzaron las FARC y el ELN. Las disidencias que se convertirán en los encargados de financiar las campañas políticas que seguramente realizaran las FARC.
Es difícil pensar en que frentes de este grupo narco terrorista que manejan el negocio de narcotráfico, minería criminal y la extorsión que le deja cifras astronómicas en dinero y que seguramente no van recibir con la desmovilización, estén pensando en abandonar sus armas y sus negocios, por ello el tema de seguridad no es claro frente a situaciones como estas que seguirán dándose en el territorio nacional.
En algún momento el ELN seguramente buscara ocupar los territorios que dejara las FARC-EP. Esto será disputado por los GAO, que también están pensando en el negocio del narcotráfico. Por ende la seguridad es un tema importante que no se ha visto desde todas las aristas que se necesitan analizar para poder buscar una solución holística frente a este tema.
Con la firma final está claro que paz total no habrá, considero que incluso podría existir más violencia, en los cascos urbanos, porque seguramente, existirán varios desmovilizados que engrosaran las filas de la delincuencia común. Aumentando los índices de extorsión y secuestro extorsivos en el país.
En la siguiente grafica podemos ver algunos de estos grupos en el territorio nacional y las principales ciudades del país.
La paz será entonces un tema que se cuestionará después de llegar a la desmovilización de uno de los actores de la violencia en Colombia.
Si observamos la siguiente grafica podemos darnos cuenta que los GAO están en las áreas donde el narcotráfico y la minería criminal es el común denominador, lo que demuestra claramente que postconflicto es un tema inexistente, puesto que no todos los grupos involucrados no están abandonando el conflicto.
Esto demuestra que si bien es cierto que con la salida de las FARC-EP la violencia en el país ha disminuido y el camino al poder de este grupo narcoterrorista está dándose, no se puede dejar de lado la negociación que plantea el ELN es diferente y si se iniciara ya una negociación con este grupo el camino sería largo y tortuoso, debido a la fragmentación que posee el ELN en su estructura hace más difícil la negociación hay quienes afirman que Gustavo Aníbal Giraldo Quinchía, alias "Pablito", se opone al diálogo en las condiciones actuales. Fuentes de inteligencia militar también han sugerido que Pablito es ahora el jefe militar del ELN, en remplazo de Eliécer Erlington Chamorro Acosta, alias "Antonio García" quien está encargado de las negociaciones con el gobierno.
El aumento de cultivos ilícitos, minería ilegal y seguramente un porcentaje importante de los miembros de las FARC-EP, estarán pensando en o abandonar y continuar en pie de lucha, como aconteció con el EPL que se desmovilizo en 1991 y que el 20% aproximadamente decidió continuar delinquiendo y que en la actualidad delinquen en el Catatumbo.
Como podemos ver aunque parezca que la paz y la seguridad en Colombia están próximas a mejorar, el análisis se debe hacer completo para no entrar en la falsa ilusión de que delitos como secuestro, extorsión y narcotráfico terminaran.
Referencias
Lecturas de minería ilegal
http://es.insightcrime.org/